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Abderramán III aprovechó la estratégica localización de una fortaleza anterior y mandó construir la actual sobre los restos de la primera en el 955 d. C. Puede visitarse tranquilamente en unas tres horas, eso sí, abrigaos bien porque suele hacer mucho viento. Si al final os decidís por este destino, aquí os dejo una página donde podéis encontrar más información y los horarios de visita; http://www.almediam.org/reportajes/reportajes_001.htm
Terminada esta espectacular excursión, visitaremos el segundo edificio más significativo de la ciudad; la Catedral. Prácticamente más fortaleza que templo, destaca por su amplitud y sobriedad en comparación con otras construcciones andaluzas de este tipo. No podéis despediros de ella sin admirar los numerosos detalles de la fachada ni de la “Puerta de los perdones”. Un aviso para los más curiosos: ¡disponen de visita guiada! Aquí os dejo los horarios y los precios; http://www.spain.info/es/conoce/monumentos/almeria/catedral_de_almeria.html
Otro templo que merece que nos impregnemos de él es la Basílica de la Virgen del Mar, tan importante para los naturales de Almería. Aunque no igual de impactante que el anterior, es sumamente acogedora. Fue construida en el s. XVI y cuentan que, en este mismo siglo, la imagen que en ella se venera, la Virgen del Mar, surgió de las aguas y fue encontrada en la playa por un guarda de una antigua atalaya cercana.
También podemos encontrar, muy cerquita, un lugar para los enamorados en el que, siguiendo lo que ya se va a convertir en tradición, las parejas cerrarán su candado dejando un recuerdo de su amor en esta plaza dedicada a San Valentín.
Una parada en el moderno museo arqueológico de Almería nos ayudará a apreciar y a entender mejor esta interesante ciudad. Esta ha sido una zona poblada por fenicios, romanos, musulmanes… los restos de vida humana más antiguos han sido encontrados en el cerro de la Alcazaba y corresponden, ni más, ni menos, que al paleolítico medio, es decir, la zona de Almería ha estado poblada, como mínimo, desde hace 35.000 años. Decidme ahora que no será apasionante una ojeada a esta muestra de nuestro pasado. Además, el museo cuenta con paneles interactivos que permitirán entender, incluso a los más pequeños, como era el mundo y cual ha sido su evolución.
La importancia del tráfico marítimo y del puerto ha dejado una profunda huella en la imagen de la ciudad que, como viajera curiosa, no podía obviar. Sobrevuelan nuestras cabezas las vías de tren, como si no hubiese transcurrido el tiempo, que permitían cargar y descargar mercancías directamente en el puerto.
Una fase de nuestra historia más reciente fue sufrida cruelmente por la población almeriense. Aunque uno de los últimos fuertes de la república, no estaba capacitada para hacer frente a los ataques y a los bombardeos, por ello, el arquitecto Guillermo Langle, ideó un sistema de pasadizos subterráneos de unos cuatro kilómetros y medio para proteger a aquellas personas que no podían desplazarse y se encontraban atrapadas en la ciudad. Debido a la profundidad de estos y para renovar el aire del interior existen, todavía visibles en las calles, respiraderos e, incluso, algunas de las entradas; eso sí, ahora camufladas bajo la fachada de quioscos. Estaban equipados, dentro de lo posible, con una enfermería y un quirófano para atender a los heridos. Para poder vivir esta experiencia es necesario que concertéis una cita previamente, gracias a esto, además del paseo por las “catacumbas” almerienses, un guía os explicará con todo lujo de detalles todas las curiosidades que merezca la pena conocer. ¡No apto para claustrofóbicos! http://www.polibeaturismo.com/boletinesAnteriores/2007/enero/noticia4.htm
Como ciudad marítima y andaluza que es, si queréis sumergiros aún más en la vida de este sitio y de sus habitantes, recordad, que como cualquier ciudad costera y andaluza, goza de un ambiente y una vida nocturna muy divertida. Almería ha sido un paraje en el que muchos personajes ilustres han fijado sus ojos; Lorca vivió aquí unos años, y no os sorprendáis si veis a Nicolás Salmerón, como el que no quiere la cosa, dando un paseo por las calles de esta ciudad. Muchas cosas se nos han quedado por ver, ya que esta excursión está adaptada al tiempo que nos regala un par de días, pero, no os preocupéis, la disfrutaremos más profundamente en otra aventura; hoy ya, volvemos a casa.
Hola de nuevo Mariela!!!
ResponderEliminarComo Almeriense que soy me siento muy satisfecha de mi ciudad y de que la gente hable muy bien de ella. Me alegro que te haya gustado la visita a mi ciudad y que la hayas querido plasmar en vuestro blog. Espero que repitas destino pues tiene miles de encantos por conocer y cuando repitas no dejes de visitar también la costa de levante, osea el Parque Natural de Cabo de Gata-Níjar te emocionarás con sus playas y calas vírgenes sin dudarlo.
Gracias y saludos!!!
Eva Castillo.
Por supuestísimo que voy a repetir. Me encantó, aunque soy consciente de que se me quedaron muchas cosas en el tintero.
EliminarMuchas gracias por pasarte por aquí y comentar. Un besazo, compañera ^^