CHAMPÚS EN SECO ¿FUNCIONAN?

Hace unos días decidí probar uno de esos champús que prometen dejar el pelo limpio para poder retrasar su lavado. Yo en concreto, tengo el pelo fino y con tendencia a engrasarse, así que, como mucho, me dura limpio dos días, pero claro, como me dice mi abuela que es peluquera (como ya he comentado en alguna ocasión), mientras más lo lave más fino se me va a poner el pelo y más frágil y, además, el pelo graso, si se lava demasiado, al final produce efecto revote y cada vez dura menos tiempo limpio.

Ahora mismo el que he probado es el de GLISS de SCHWARZKOPF y, la verdad, es que realmente funciona. Ayer, por ejemplo, decidí hacer la prueba de ponerme el champú solo en una parte del pelo para ver la diferencia, me lo puse por la raíz del pelo de alrededor de la cara y en el resto nada, y la diferencia era notable, si me cogía una coleta, como solo se venía esa parte de la raíz, el pelo estaba limpio y sin grasa; pero si me hacia la raya, ya se veía el pelo más graso y cuarteado, incluso hoy todavía se nota la diferencia. Por tanto basándome en mí prueba, puedo decir que estos champús funcionan y, al menos, pueden retrasar un día el lavado del cabello.

La forma de usarlo es ir pulverizando el producto capa a capa por toda la raíz, después lo dejamos actuar unos instantes y cepillamos bien para eliminarlo. Si vemos que no se elimina bien podemos usar el secador.

Aunque yo solo he probado esta marca, existen otras que también dan los mismos resultados, como GARNIER INSTANT FRESH del que me han hablado muy bien, incluso dicen que está mejor que el que yo uso. Así que bueno, lo probaré cuando acabe con el mío. Otra de las marcas que también nos ofrecen este tipo de productos es la marca LUSH (si queréis más información sobre este marca solo tenéis que pinchar aquí), y también se supone que hay en el MERCADONA, aunque yo por lo menos cuando he ido no lo he encontrado.

Si no queremos comprar ninguno de estos champús porque no lo vamos a amortizar lo suficiente, también podemos usar el truco casero de los polvos de talco. Se trata de ir aplicando los polvos por la raíz del pelo y dejar actuar unos minutos, después cepillarlo y como con el champú, si queremos eliminar bien los restos, usar el secador. El resultado es muy parecido, pero tiene una pega ,y es que el pelo queda muy mate, sin embargo,  para sacarnos de un apuro está muy bien.

Con respecto a los precios de estos champús, no me atrevería a decir nada, porque varían bastante de un sitio a otro. Yo fui al Mercadona y el de GLISS costaba casi 4€, así que no me lo compré, al día siguiente fui a PRIMOR y, el mismo champú, costaba 2,75€ así que obviamente me lo compre allí.

En cuanto a las posibles pegas que tienen este tipo de champús, es que no deja el pelo con brillo, tampoco es que lo deje tan mate como con los polvos de talco, pero un pelín mate sí que queda. Otra pega que le pongo yo en mi caso, es que, como te tienes que cepillar el pelo después de usarlo, no lo puedes usar si llevas el pelo rizado, ya que destrozaríamos los rizos con el cepillado, así que solo lo podemos usar cuando llevamos el pelo liso.

¿Qué opináis de estos champús?